El documento normativo contempla el uso del idioma en la atención al público, publicaciones informativas, señalización o gestión de nombres de calles.
Iolanda Gomis, técnica del Servicio de Normalización Lingüística municipal, explicó la importancia de proteger la toponimia y la riqueza lingüística de Ares como forma de proyectarse en el mundo.
El Pleno de este lunes ha aprobado por unanimidad la ordenanza sobre el uso social de la lengua gallega en la administración local, impulsada por el Servicio de Normalización Lingüística compartido entre Ares, Cabanas, Mugardos, Valdoviño y Neda. El documento es una base normativa para configurar y mejorar la documentación, los procesos lingüísticos y las comunicaciones en gallego de la institución Ares.
La ordenanza, en palabras de Iolanda Gomis, técnica del Servicio de Normalización, “es el siguiente paso en la promoción de la lengua en la administración dentro del marco normativo autonómico anterior. Es un vestido, imagen de ser gallego y con voluntad de diseño. Todo lo que nos tomamos en serio está vestido, diseñado con bases normativas, y eso es lo que buscamos con la ordenanza”.
Gomis también explica la importancia de proteger la riqueza y biodiversidad gallega en el entorno municipal, trabajando para que “el Ayuntamiento se convierta en un motor de su promoción”. «Simplemente vino a nuestro conocimiento entonces. Hay un gallego de Ares, unos topónimos de playas y nombres propios que dan una gran riqueza y que tenemos que conservar. Esos son algunos de los granitos de arena que traemos al mundo”, dijo.
Tal y como recoge el documento aprobado, la iniciativa se nutre del marco normativo previsto por la Ley 3/1983 de Normalización Lingüística y el Plan General para la Normalización de la Lengua Gallega (PXNLG), apoya la visión de las corporaciones locales como agentes activos en la implantación del gallego en los entornos de carácter municipal.
Por tanto, la presente ordenanza recoge y regula el uso social de la lengua, entre otros aspectos, en la atención al público, en la documentación, publicaciones y acciones informativas o en la señalización y rótulos que promueve el Ayuntamiento. También en todo lo relacionado con topónimos y nombres de calles, como parte del impulso institucional a la lengua gallega.